Corría el año 1985. No recuerdo el mes, no recuerdo el día.
Ello no es relevante, ya que fuese el día que fuese y la hora que fuese,
ese instante fué nefasto...
El instante en que alguien me avisó: "se suicidó Pablito"
Lo encontraron en las rocas de Trouville, ya sin vida. Hubo quien lo vió entrar al agua. Pablito, tenía tan sólo 23 años. Muchacho joven, inofensivo, calmo, trabajador, humilde, servicial y querido por todos.
Pablito frecuentaba una iglesia cristiana evangélica que se ubicaba en la Av. Gral Rivera esq. Diego Lamas, llamada "Templo Rivera".
La natural conmoción que provocara en mí tal suceso, hizo que comenzara a indagar acerca del posible "por qué" de tal acto.
Problemas en la familia? No. Era una familia de la cuál no se conocían problemáticas internas, privadas. Un problema "amoroso" quizás?. No...Pablito era un chico muy tranquilo respecto a esos menesteres...
Porqué?... Y mil veces más... Porqué?...
Una señora allegada a la familia de Pablito, cuyo apodo era "Cacha" se detuvo en la calle a hablar conmigo al respecto. Y esto fué lo que me narró:
- Varios días antes de que Pablito se fuera, él estuvo conversando conmigo. Estaba muy triste, muy deprimido. Nunca lo había visto así. En determinado momento, me comentó que en la iglesia, el pastor le dijo que el tenía "santidad" pero que esa "santidad" le deparaba "sufrimientos", porque "dios" a él lo había "elegido" y tal elección implica pasar por "pruebas". Que él era un ejemplo de "santidad" y que éste mundo, no era para él... Y Pablito me repitió varias veces "este mundo no es para mí", muy triste y muy deprimido...
Ante tal narración, vi con mucha claridad lo que había sucedido con Pablito y que lo llevara a tomar tal determinación.
Una vida joven y sana, fué inducida a buscar su final...
Hace falta que me explaye más?...
Juan Carlos Rubio.
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